¿Quién es más animal?

Deseo comentarles de un libro y de una circunstancia de alarma ambiental que ahora vivimos en Monterrey. Qué más quisiera yo estar hablando de las injusticias de Lisboa, en donde debería estar viviendo ahora mismo, pero hablaremos de la same old shit de acá.

Por nuestro constante afán de enmierdar el lugar en donde vivimos, arrasarlo y atragantarnos de sus dones como la especie parásita que somos, han estado bajando por su propia cuenta algunos osos negros provenientes de diversos cerros que –todavía- nos alegran la existencia.

Muchas estupideces se han cometido en nombre de la estupidez humana misma, que es inagotable. Hace días el albañil Esteban Palacio Basilio atrapó a un osezno de tres años. Imagínense a un albañil, con toda su delicadeza de formas y sensibilidad ecológica, su forma tersa de abordar las situaciones y su mano luenga para la terneza hacia un animal asustadísimo y hambriento como lo estaba el osezno. El albañil mató al osito porque lo trató como corresponde a un albañil tratando a un oso. La PGR detuvo al trabajador de la construcción porque Palacio Basilio no está señalado como el presunto responsable de la muerte del animal, moción que apoyo por completo: el osezno seguramente se suicidó antes de pasar más tiempo en compañía del nefando albañil, que tampoco es cualquier albañilucho. Los de Monterrey pertenecen a una mutación especial en los trabajadores de la construcción de todo el mundo: son los únicos seres humanos que aprenden a hablar cuando ya son adultos, etapa en la que alcanzan a organizar el 30 por ciento de sus operaciones cerebrales al cumplir la mayoría de edad (pero la de EU). Todo es producto de esas largas horas expuestos al sol regio, que se volvió más mamón desde que Alfonso Reyes le hizo un poema.

Pero no conforme con contar con la recua de albañiles tarados más célebre de la comarca, en Monterrey contamos con prelados católicos que les dan buen acompañamiento a los albañiles en su oquedad craneal:

Y cito de El Norte de la nota publicada hoy, escrita por Ángel Charles: "El Cardenal Francisco Robles Ortega pidió ayer un trato especial para el albañil Esteban Palacio Basilio, quien el jueves capturó un oso negro que después murió.
El prelado pidió a las autoridades considerar la ignorancia y buena fe del albañil.
"Sí tiene que haber una consideración y un tratamiento especial, puesto que esta persona o las personas obran de buena fe, obran con buena intención, pero sin conocer a ciencia cierta cuál es el verdadero trato y el cómo ayudar a un animal", señaló Robles Ortega en entrevista.
"Debe considerarse, al darle una pena a esta persona, su buena intención, su desconocimiento práctico de cómo tratar este animal.
"Que no se le aplique la Ley como cuando se debe aplicar con todos sus agravantes, es decir, plena conciencia, pleno conocimiento y plena voluntad de hacer un daño. Creo que no es el caso. La persona no quería hacer eso".
EL NORTE publicó ayer que Palacio Basilio fue liberado en la PGR, pues en la denuncia se menciona su participación como quien el jueves lazó y capturó al oso de 3 años, y no está señalado como el presunto responsable por la muerte del animal".

Fin de la cita.
Como creo que ya es inevitable, el libro del año 2008 para mí que lo he leído tarde es: "La puta de Babililonia". Este libro de Fernando Vallejo que les recomiendo obligatoriamente como un texto fundamental en la vida de cualquier creyente y no creyente.

En él, además de la deliciosa, certera, aguda y sodomizante verdad sobre la iglesia católica a quien el autor le llama deleitosamente "La Puta", Vallejo defiende visceralmente, pero con cierta razón, cómo la iglesia católica y la mayoría de las religiones trata a los animales como carne de sacrificio y no los considera como entidades con alma y capacidad de sufrimiento.

De hecho Vallejo superpone la presencia de los animales sobre los humanos, al menos en su preferencia, por la incapacidad de los mismos para defenderse y hacer valer sus derechos, que los tienen, como así fue promulgado en 1978 por la UNESCO.

Siempre me pareció un poco exagerado por el tono, que jamás por su contenido e ideas, que manejaba Vallejo respecto a la defensa de los animales. Apoyo por entero su defensa, pero siempre me daba ese tufillo de intolerancia y maniqueísmo que a mí en lo particular me es tan familiar.

Pero cuando leí la nota del cardenal regiomontano y todas sus insensateces declaradas en defensa del albañil idiota, su compañero, no me quedó más que repetir en voz alta las palabras de Vallejo: "del inconmesurable sufrimiento de los animales Cristo y Mahoma son los primeros culpables".



Post Scíptum:

Citas deliciosas de Vallejo:

"Kofi Annan que en su paso de diez años por la ONU no se perdió boda de puta ni capada de marrano". (Hablando de los invitados especiales al entierro del papa Juan Pablo II).

"¡Qué feliz sería hoy el mundo sin la sombra ominosa de Cristo! Pero no, el Espíritu Santo, que caga lenguas de fuego, había dispuesto otra cosa!". (De cómo se iba esparciendo el catolicismo en el mundo).

"Se puso León X, aunque del feroz animal sólo tenía el nombre: gordo, miope, de ojos saltones, cabalgaba de lado como mujer a causa de una úlcera en el trasero adquirida tal vez en sus devaneos..." (Ilustrando datos biográficos de Giovani Medicis).

"De los que llegaron a Pisa algunos se lograron embarcar rumbo a Tierra Santa, pero para caer en manos de corsarios sarracenos que se han debido de dar con ellos un banquete de sibaritas digno del padre Maciel y sus legionarios de Cristo".

(Sobre los niños franceses que fueron a las cruzadas. Esta cita no me hace gracia de hecho, pero me temo que es la verdad histórica).

"Papa corrupto es pleonasmo".

"Cada quien es su idioma".

"Dios hizo muy mal en dejarnos su palabra sujeta a las incertidumbres humanas".

Fin de las citas y de mi exacerbado entusiasmo por Fernando Vallejo, sólo por el día de hoy.